No solamente los trabajadores enfrentamos un fuerte intento de reducir el salario que conquistamos a lo largo de luchas de años, sino que son decenas de miles las familias que han perdido su único ingreso producto de los despidos producidos tanto en el ámbito del Estado como del sector privado.
Pero este intento de avance sobre nuestros derechos encuentra a los judiciales unidos y movilizados por miles, con una enorme participación de judiciales jóvenes -que confluye con la presencia firme y constante de nuestros jubilados-, y construyendo permanentemente nuevas formas de unidad con el resto de los trabajadores.
Así como esos trabajadores de fines del siglo XIX fueron capaces de construir el 1º de mayo de 1890 la primera huelga internacional en reclamo de las 8 horas de trabajo, hoy volvemos a levantar la bandera de la unidad de clase. Esto se refleja tanto en la articulación lograda con otros gremios en el marco del conflicto provincial, como en el avance de la unidad en la lucha de los trabajadores en el orden nacional.
Se avecinan muchas otras peleas, para las que la que estamos transitando por la defensa del salario marcará la relación de fuerzas entre nuestro gremio y los que intentan avanzar sobre nuestros proyectos de vida, individuales y colectivos.
Desde la AJB saludamos orgullosamente a los miles y miles de judiciales que en toda la Provincia vienen poniendo su cuerpo y su inteligencia para sostener durante casi tres meses este conflicto, y convocamos a seguir luchando en unidad, y con la alegría de saber que peleamos por una vida mejor para todos nosotros y para el conjunto de la clase trabajadora.