Un hecho de extrema gravedad se vivió el pasado lunes 7 de marzo por la mañana en una Defensoría Civil de Florencio Varela, departamento judicial de Quilmes, cuando un hombre tomó de rehén durante más de tres horas a una trabajadora y un trabajador judicial.
Si bien esta situación fue extraordinaria y culminó con una empleada de mesa de entrada y el auxiliar letrado de la Defensoría Civil 24 como rehenes, las y los trabajadores judiciales se ven expuestos cotidianamente a situaciones de peligro y violencia durante su jornada laboral.
Ante lo sucedido, la AJB solicitó reuniones urgentes con el Ministro de Seguridad, Sergio Berni; el Procurador General, Julio Conte Grand y Luis Genoud, presidente de la Corte, para abordar seriamente el problema de la seguridad y las condiciones laborales de las y los trabajadores de la justicia bonaerense.
Al respecto, Nahuel Staffa, Secretario General de la AJB Quilmes señaló que “lamentablemente la tremenda situación vivida por los compañeros y compañeras de Florencio Varela no es algo excepcional, sino que son los riesgos a los que estamos expuestos diariamente las y los judiciales en las veinte departamentales”.
Y remarcó que “esto se suma a las situaciones de precariedad edilicia y sobrecarga laboral que hacen un combo gravísimo que se paga con la salud de los compañeros y compañeras. Por ello pedimos urgente audiencias a las autoridades correspondientes para poder dar soluciones concretas a las diversas problemáticas planteadas”.