El hecho configura una nueva demostración de la criminalización de la protesta social.
Hace pocos días atrás la Policía Metropolitana de Macri reprimía ilegal y salvajemente a trabajadores, pacientes y periodistas en el Hospital Borda. Contemporáneamente la policía de Capitanich hacía lo mismo contra docentes chaqueños, lo mismo que la del Gobernador Sapag en Neuquén y la de Peralta en Santa Cruz aportaba lo suyo.
Durante el conflicto del año 2012 los trabajadores judiciales fuimos víctimas del trabajo de “inteligencia” de la Policía Bonaerense.
En el caso que ahora nos ocupa aparece en escena la Justicia, es decir, que el aparato represivo del Estado funciona aceitadamente contra los trabajadores que luchan por sus derechos.
Desde la AJB repudiamos el hecho y nos solidarizamos con las y los compañeros detenidos.