A partir de las 10 hs., trabajadores judiciales de Junín junto a los miembros de la Comisión Directiva Provincial y representantes de las conducciones de las 19 departamentales, realizaron un acto de repudio frente al Tribunal de Trabajo, que pretende imponer la extensión horaria como paliativo a la sobrecarga laboral.
Allí, Pablo Abramovich, secretario General de la AJB, expresó su reconocimiento a los “trabajadores que se vienen bancando no sólo la decisión de no continuar trabajando después de las 14 hs. acatando la medida de fuerza dispuesta por nuestro gremio, sino también aguantando la relación tirante y casi violenta que vienen sufriendo fundamentalmente con la Presidenta del Tribunal. Por eso estamos acá y ratificamos el acompañamiento del gremio hasta que este conflicto se termine”.
Además, Abramovich destacó que “este no es un conflicto solamente del Tribunal de Trabajo de Junín, sino que es una situación que atraviesa a toda la provincia y que tiene que ver con la sobrecarga y el colapso estructural que tiene la Justicia. El Poder Judicial hace años que viene padeciendo esta grave situación y la respuesta del Estado y de la Suprema Corte fue siempre apretar a los trabajadores para suplir la falta de soluciones de fondo”.
A fines de los `90 a esta la sobrecarga de trabajo se le respondió con miles de trabajadores gratuitos, los meritorios, que atendían las mesas de entrada de los Juzgados, Fiscalías y Defensorías de toda la provincia. “Es decir que ese colapso se resolvió en su momento con trabajo gratuito. Pero gracias a la pelea que dimos desde nuestro gremio, logramos el pase a planta permanente de 2 mil meritorios”, recordó Abramovich.
Sin embargo, la Corte volvió a insistir con esa metodología e incorporó a cientos de pasantes para resolver, una vez más con trabajo gratuito, el problema de la sobrecarga laboral. “Como sindicato tuvimos que volver a dar una pelea -sostuvo el secretario General de la AJB- porque la respuesta que siempre dan desde el poder es apretar a los empleados en vez de exigirle al Estado provincial la designación de esos miles de trabajadores que son tan necesarios”.
“Y ahora, fracasadas las pasantías, lo que se intenta es utilizar una herramienta como la habilitación de horas (extensión horaria después de las 14 hs.) que se usaba excepcionalmente, para que sea la regla a aplicar cuando los juzgados no pueden ponerse al día con el trabajo porque es imposible hacerlo con el escaso personal que tienen”.
Más allá de la responsabilidad de los miembros del Tribunal de Trabajo de Junín, Abramovich señaló que “también hacemos responsables a la Suprema Corte porque este Tribunal tuvo hace poco una auditoría y para resolver el atraso, los auditores de la Corte le dijeron a los jueces que habiliten el personal para resolver ese tema”.
El juzgado tiene 3 cargos vacantes, que representan prácticamente el 30% de la planta de empleados. En vez de reclamarle a los trabajadores que cumplan funciones por encima de la jornada, los jueces podrían pedir a la Corte el nombramiento de trabajadores en esas vacantes. “Nosotros planteamos que había que cubrir esas tres vacantes para garantizar en principio, la cobertura de la sobrecarga laboral. Pero los jueces en vez de reclamar y ponerse firmes para arriba deciden apretar a los trabajadores”.
Y agregó: “No vamos a tolerar la habilitación de horas porque es aceptar el hecho de que vamos a absorber la sobrecarga laboral. Por eso definimos junto a los trabajadores realizar una medida de fuerza”.
Sin embargo, Abramovich destacó que “la Corte está en un problema porque sabe que no hay ninguna norma que habilite a los Juzgados, Tribunales o Cámaras a disponer de la habilitación de horas, lo que implique una extensión unilateral de la jornada laboral. Y si esa norma existiera sería inconstitucional”. Es por eso que la AJB ya advirtió que dispondrá de medidas de fuerza ante cada habilitación horaria que esté originada en la sobrecarga laboral estructural.