El sábado 17 en la Plaza de los Dos Congresos tendrá lugar, a partir de las 16 horas, el acto de la XXVII Marcha del Orgullo 2018. La marcha se realiza en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires desde el año 1992, y tiene como objetivo visibilizar los reclamos y conquistas del colectivo LGBTI, como así también el orgullo por la orientación sexual, identidad y expresión de género, fomentando el respeto contra la discriminación y la estigmatización.
Una de las consignas históricas de la comunidad LGBTIQ, por la que se reclamará el 17 frente al Congreso, es el Cupo Laboral Travesti y Trans, reivindicación por la que viene bregando desde hace tiempo la Secretaría de Género e Igualdad de Oportunidades de la AJB.
La ley provincial 14.783 fue sancionada en 2015 pero aún no ha sido reglamentada, y su efectiva puesta en vigencia es uno de los principales reclamos para un sector de la población que históricamente ha sido marginado.
Desde la Asociación Judicial Bonaerense se exige desde hace algunos años a la Suprema Corte de Justicia bonaerense la regulación de este cupo en el Poder Judicial, que constituye el 1% del total de la planta de trabajadorxs. Su implementación implicaría el ingreso, como mínimo, de 265 personas trans, sobre la base de 26.500 empleadxs judicialxs en toda la Provincia de Buenos Aires.
A tal fin, el gremio ha presentado en junio de este año el proyecto de regulación del cupo travesti-trans en el Poder Judicial provincial, como así también otras demandas de la Secretaría, entre ellas la licencia laboral por violencia de género.
“La inserción al mercado laboral de las personas trans es difícil debido a los altos niveles de prejuicio y hasta de odio que posee parte de la sociedad argentina hacia ellas. Se trata de un reclamo urgente, ya que en la actualidad se mantiene el promedio de vida de las personas trans en los 35 años, y esto se encuentra relacionado con la imposibilidad del acceso a un trabajo y la consecuente negación de derechos fundamentales como la vivienda, salud y la educación”, expresaron desde la Secretaría de Género e Igualdad de Oportunidades de la AJB.
Se vuelve central también este año la consigna “Basta de genocidio travesti-trans”, puesto que a la estadística alarmante de los trans-travesticidios se le suma lo que se denomina “travesticidio social”, es decir, las muertes asociadas a la falta de atención del Estado.
Asimismo, la AJB exige el cese de la persecución, judicialización y criminalización del colectivo travesti trans y propone que las capacitaciones con perspectiva de género sean obligatorias para todas las personas que trabajen en la Justicia.